domingo, 11 de julio de 2010

Una reflexión del Obispo +Julio Fernández

La muerte no es opcional para las criaturas de Dios.
La muerte es un hecho ineludible.
Dios en su soberanía elige como se caba nuestra estancia de prueba en la tierra, por ello en el libro de oración común hay oraciones para pedir ser librados de muerte violenta.
Los que sobreviven en una catástrofe natural, enfrentan una prueba de caracter, humanidad y solidaridad. Las acciones cuentan en la eternidad.
El carácter del hombre es probado y la maldad de unos hacia otros es lo que hace la vida intolerable en ciertas circunstancias.
Dios quiere que aprendamos a vivir en armonía los unos con los otros y ser capaces de dar la vida por la del otro.
La forma de morir no es opcional, pero la forma de vivir si lo és.
El ser humano elige siempre que hace con el don divino de la vida.
"Uno vive o muere para si" o "vive y muere por el amor de Cristo"